Orvieto

Hace unas semanas tomamos maletas y nos dirigimos a una de nuestras regiones favoritas de Italia: Umbría. Nuestra primera parada la hicimos en la hermosa ciudad medieval de Orvieto donde pasamos un hermoso día recorriendo sus calles, comiendo su comida local y visitando los lugares más representativos del pueblo. Dejamos el carro en uno de los estacionamientos fuera de la muralla del centro y subimos a pie recorriendo sus callejuelas estrechas.

Llegamos hasta Piazza del Duomo donde podemos ver que por ser temprano por la mañana, los restaurantes y bares alrededor de la plaza aún están cerrados, así que aprovechamos para sacar un par de fotos del lugar ahora que hay poca gente y que tenemos el lugar casi para nosotros solos. La luz de la mañana nos ayuda a sacar un par de lo que consideramos sean lindas fotos y nos quedamos a ver lo bonito que se ve el Duomo bañado con la luz del sol por detrás (foto de inicio).

El Duomo

La joya arquitectónica más notoria en Orvieto es sin duda el Duomo, con su hermoso estilo gótico. Destacando su maravillosa fachada rica en decoración que en verdad la hace lucir como una preciosa joya llena de detalles y de luz; los mosaicos (que debido a su fragilidad han sido restaurados ya varias veces) y las esculturas en las que trabajaron muchos artistas, hacen que el interior lo encontremos un poco humilde en comparación a su exterior.  La catedral se comenzó a construir a finales del siglo XIII luego del Milagro de Bolsea (aquí pueden leer un poco de esa historia). En el interior del Duomo encontrarán la Capilla del Santísimo Corporal, que se llama así precisamente por conservar la Reliquia del Milagro de Bolsena.

La Torre del Moro

Nos encaminamos hacia la otra atracción principal de Orvieto, o sea La Torre del Moro. Este monumento cambió varias veces su uso: Construido por encargo de la familia Della Terza, pasó después a manos del Papa, enseguida a la sede del Consiglio dei Sette y finalmente del Gobernador de la ciudad. La torre mide 47 metros de altura y es posible subir a admirar la ciudad desde lo alto (cosa que a nosotros gusta mucho), arriba se encuentra una campana que data del 1313, la otra campana que encontrarán es más “reciente”, siendo solo de finales del siglo XIX cuando también se añadió el reloj.

Otras cosas que ver

Además del Duomo y de la Torre del Moro, en Orvieto hay muchísimas otras cosas por ver, por ejemplo la Ciudad Subterránea (el tour lo pueden tomar desde el duomo), el Pozo de San Patricio, la Necropoli Etrusca, la Fortaleza del Albornoz y -si van en el período de Navidad- no se les olvide de visitar el pesebre en el pozo.

Que comer

Para comer pueden hacerlo en varios lugares dependiendo del presupuesto y va desde comprarse el tan famoso panino (por el cual pagarán más o menos de 2 a 3 euros, dependiendo del ingrediente que escogerán y que podrán comprarse en cualquiera de las típicas alimentari) con cualquiera de los deliciosos salamis de la región y comerlo mientras continuan a visitar la ciudad caminando por las callejuelas, hasta sentarse en la mesa de un restaurant donde podrán disfrutar de dos o tres entradas por precios que varían entre los 15 y 45 euros por persona.

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