Teotihuacán, México
El sitio arquelógica de Teotihuacán se encuentra a 40km de la Ciudad de México, en el territorio de San Juan Teotihuacán a más de 2300 metros de altura. Conocida también como la Ciudad de los Dioses, Teotihuacán es el guardián de los vestigios de una de las civilizaciones más antiguas del norte y centro América.
Yo iba muy emocionado durante el camino, en mi vida he visitado muchos sitios arqueológicos pero todos de épocas romanas o griegas, Teotihuacán era algo diferente, de nuevo y en un cierto sentido, de misterioso. Apenas llegas al grande estacionamiento te sumerges en la atmósfera del lugar mirando los puestecitos de souvenirs tan típicos del país, el olor de los inflamables tacos (uno de los inventos más importantes para la humanidad, en mi opinión) te acompañan hasta la taquilla, apenas pasas el cancel de la entrada entra en juego la magia y te das cuenta de que la belleza del lugar es algo que muy difícilmente olvidarás.
Una vez que entramos en las ruinas nos encontramos delante a nosotros una avenida inmensa de 45 metros de ancha por 4km de larga, la Calzada de los muertos, esta calle conecta los principales edificios de Teotihuacán. A los lados se encuentran varias plataformas que los aztecas (si, los aztecas) y los mismos españoles pensaban fuesen tumbas. En esta avenida se encuentran los principales monumentos de la ciudad: El Palacio de Los Jaguares, Palacio de Quetzalpapalotl, Las pirámides del Sol y de la Luna y la Ciudadela (un gran complejo de edificios públicos y políticos) donde al interno se encuentra el bellísimo Templo de Quetzalcóatl.
La Pirámide del Sol
El monumento más importante y conocido de la ciudad es sin duda La Pirámide del Sol. Alta 65 metros fue construida en el año 100 d.C. aunque fue solamente al inicio del siglo III que fue terminada, alcanzando las medidas finales de cerca 225 metros de lado y 75 metros de alto. Es posible subir hasta la misma cima, un poco cansada como subida teniendo en cuenta que está en pleno sol, pero la fatigada vale la pena: Es desde allá arriba desde donde se domina la vista de todo el sitio y desde donde -según la leyenda- se puede pedir un deseo a los dioses para que sea concedido. Al final de la Calzada de los Muertos se erige majestuosa la otra pirámide, la de la Luna: Esta estructura es alta 42 metros y es la que ha sido mayormente ligada a los sacrificios humanos, tan es así que han sido descubiertos restos humanos y algunas sepulturas.
En los últimos años se están haciendo estudios subterráneos en la ciudad; bajo el suelo del Templo de Quetzalcóatl han sido encontradas algunas galerías que llevan hacia el mismo centro de la Pirámide del Sol. Algunos arqueólogos piensan que estos túneles estén relacionados al mito del Génesis que según este el hombre nació del vientre de la luna y del sol. Según los mismos arquéologos, la civilización de los Teotihuacanos creía en las diferencias entre el mundo de los vivos y los muertos, la presencia de estos vastos espacios subterráneos demuestra solo la importancia que tenía el más allá para este pueblo.
Pasear por Teotihuacán es una experiencia única si se va a México, el óptimo estado de conservación de los edificios, las decoraciones ricas y misteriosas, la majestuosidad de las pirámides nos hacen entender como eran adelantadas estas civilizaciones mesoamericanas y que de cierto el haberlas introducido como rústicas y salvajes por parte de los conquistadores fue un grave error, como lo fue el de los sacerdotes cristianos el de haber quemado y destruido todos los códices prehispánicos que hoy en día nos hubieran ayudado mucho a conocer y comprender esas civilizaciones.