Norcia
Norcia es una pequeña ciudad que es reconocida por ser la ciudad natal del santo patrón de Europa: San Benedetto. Nosotros decidimos de visitarla en nuestro viaje por Umbría y porque Max tenía un especial interés que ya les contaré más adelante. Llegamos temprano por la mañana y apenas estacionamos el carro en las afueras del centro nos dirigimos entusiasmados a visitar sus principales iglesias y monumentos.
Nos recibe la Porta Romana, una de las puertas más antiguas de las cuales se accede al pueblo. Parados ante ella se puede leer una frase en latín que dice: Vetusta Nursia (Vieja Norcia), pasando luego la puerta se está en la calle Orso Settorio y en lo alto de la puerta, viéndola desde dentro, un hermoso reloj nos da la hora local.
Comenzamos a caminar por la calle principal que a esa hora está casi desierta. Todo me parece tan limpio y en tan bien cuidado. Varios negocios abierto ya a esa hora se empiezan a llenar de gente del lugar y de los pocos turistas que están de visita. Esa parte de la ciudad es peatonal y no se ven los molestos carros por ningún lado, la gente va a pie o en bicicleta pero de esto último hay muy pocos, como si ello también no estuviera permitido o simplemente es que a pie se disfruta más el paseo.
Norcinerie
Y bueno, la razón por la que Max insistió tanto en que viniéramos a este pueblo es porque Norcia es famosa por sus embutidos y sus platillo a base de trufas negras. Por todas partes encontrarán locales donde venden carnes y embutidos llamadas norcinerie y que se especializan en carne de caza (principalmente jabalí), embutidos y fiambres, además de la venta de trufas negras y blancas frescas, conservadas, en salsas, etc. Un paraíso para los amantes de este hongo. Y bueno, si van a Norcia es imposible no salir con el bolsillo un poco temblando luego de haber comprado un poco de todo aquí y allá.
Llegamos hasta Piazza Vittorio Veneto donde nos paramos un poco a disfrutar el día, ver la gente que va y viene y apreciar por fuera el Teatro Cívico que data del 1876 pero que durante mucho tiempo estuvo cerrado a causa graves daños causados por diferentes terremotos. El teatro además sufrió un grave incendio que lo dejó prácticamente en ruinas y que no fue hasta 1995 en que finalmente terminaron las reparaciones y pudieron por fin abrirlo de nuevo.
Finalmente, luego de habernos regalado el placer de una rica comida en un restaurante que nos habían recomendado, llegamos a la plaza principal del pueblo donde se encuentran el Palazzo Comunale, la Basilica di San Benedetto que se dice está construida donde una vez estuvo la casa del Santo. Al centro de la plaza encontramos el monumento de San Benito que fue erigido con motivo del XIV centenario de su nacimiento.
La plaza está llena de gente, los locales pasean después de la hora de la comida, los turistas con nuestras cámaras tratamos de inmortalar el momento; niños corriendo, ancianos paseando a sus perros. Esta plaza es sin duda el corazón de la ciudad y se nota.
Luego de haber tomado un café en un bar cercano seguimos paseando por las callecitas aledañas. Hemos solo estado unas pocas horas en Norcia pero nos ha gustado mucho y seguramente regresaremos.
En el 2016 los terremotos ocurridos en Italia afectaron gravemente Norcia. El 30 de Octubre del 2016, a las 7:41 de la mañana un fuerte temblor provocó el derrumbe de la bellísima Basílica de San Benito y su antiguo campanario, además de dañar otros importantes monumentos como el Palazzo Comunale, las antiguas puertas de la ciudad, la Castellina y varias iglesias.
Nunca me voy a olvidar de las imágenes que veía en internet. Siglos y siglos de arquitectura rasa al suelo. No hemos ido a Norcia desde entonces y no sé en qué condiciones estará, sé que han hecho ya varias reparaciones y me da gusto por ello. Norcia y su gente saldrá también de esta.